viernes, 16 de julio de 2010

Un poco mas de mi: De sobre como salí de mi depresión

Esta no es la primera vez que escribo de mi, es más, durante un largo tiempo de mi vida esta actividad era la única que me mantenia viva, literalmente hablando.

Normalmente uno suele dejarse este tipo de cosas para si, pero hoy hay alguien necesitando de mi, tú que estás leyendo, quiero que sepas que a pesar de la distancia, yo te quiero, yo te apoyo, y pienso en ti; muevo mis hilos desde aquí para que todo te sea mejor, un poco mas faciles, pero tienes que tener clara al menos una cosa, no eres el primero, no eres el último, y lo más importante, las lágrimas de hoy, compran las alegrías de mañana

Mi vida, objetivamente hablando, no fue tan dificil como para preveer el episodio que voy a relatarles, sin embargo, subjetivamente, estuvo llenas de mas bajos que altos, que hicieron que a eso de los 12 años se desatara una depresión que duró años.

Cuando digo que mi depresión duró años, también es una expresión literal, pues no fue sino hasta los 19 años que volvi a ser yo misma, esta mina medio loca, que siempre anda en algo raro, y si bien suele mantener bastante bajo perfil, a final de cuenta resulta bastante extrovertida.

Pues si, esa cosa rara mía, esta extravagante mezcla de contradicciones tan armoniosamente combinadas hicieron de mi, un ser bastante solitario en aquellos siniestros tiempos, pues, para colmo de males, mi depresión me cayó en plena adolecencia.

Y verán, ser una chica fricky, en aquel tiempo en que ser fricky y Otaku era cosa muy rara, repercutieron que no "encajara" bien en ningun grupo, nunca pertenecí a alguno de ellos en un 100%, pues, dentro de ellos, siempre terminaba siendo el elemento discidente, y en esa época en que uno busca su identidad dentro de un grupo, resultó que mi identidad propia tenía mayor fuerza dentro de mi.

Objetivamente, yo tenía demasiado claro quien era y para donde iba(cosa rara cuando uno va al colegio), lo que en cierta forma me impedía "perder" mi identidad propia y formar parte de una identidad colectiva, y aclaro, ya que está de paso, que hasta el dia de hoy sigo asi. Si bien, esto en si no es malo(sino todo lo contrario), en la adolecencia es devastador, porque lleva en cierta forma al rechazo.

Es como el cuento del patito feo, rechazada por ser diferente, y aclaro que no culpo a mis compañeros de la media, quienes fueron los que mas tuvieron que aguantarme en aquella fatidica época, porque esto fue siempre, desde que yo era niña, es sencillamente que a causa de la depresión que se escondía dentro de mi, mi reacción no fue buena, pues hoy, casi 10 años despues, tengo claro que todo fue una cosa de actitud, de aceptar mis virtudes y mis defectos, era tan sencillo como quererme tal cual soy.

Así fue, como la causa de mi depresión, la que la inició, no fue la misma que la mantuvo "viva" (y matandome) durante todos esos años.

¿Cómo uno se mantiene viviendo así tantos años? La verdad no lo tengo muy claro, en una depresión, las ideas suicidas no tienen nada de raro. Yo debo admitir que sigo aquí gracias a una mina llamada Mia Spencer. Ella es británica, y auqnue en realidad no habla una pisca de inglés, es escritora igual que yo, y tiene el karma que no puede ser famosa porque tiene la maldición de la eternidad sobre sus hombros, o sea, es un vampiro, que vive sólo de noche, que vive su no-vida en la oscuridad de la noche, y que ya desistió a su sueño de volver a ver el sol, porque sabe que es imposible. ¿Se dan cuenta quién es? Pues si, era yo, mi alter ego, mi otro yo. Era bajo ese nombre con el que firmaba aquello que no me atrevía de decir, y a su vez, era alguien aun mas miserable que yo, que me permitía "saber" que siempre hay alguien peor.

Pero, ¿cómo salí de ahi?... aunque suene raro, por cansancio. Sip, me aburrí de sobrevivir así, porque tengamos claro que eso no era vida. Decidí concientemente dejar de ver todo tan negativo, decidí concientemente darme una oportunidad, y darle al mundo una oportunidad (me viene a la mente la voz del Burro de Shrek cuando le pregunta "que tienes contra el pobrecito mundo?").

Ese cambio de actitud fue mágico, si antes no creia en la magía, en ese momento empecé a creer, y ese momento fue a finales de 4to medio, esa magia me hizo entrar a estudiar la misma carrera que la gente maravillosa que son mis amigos, todos bichos raros igual que yo, pero todos de distinta especie.

No era diferente, sino que era ÚNICA!

Pero... sigo sin contestar la gran pregunta, como sali de la depresión. Si, dije que fue el cambio de actitud, y la gente que me apoyó, peor hubo algo mas, y aunque va a sonar muy fricky, no me podrán negar que no les extrañará que venga de mi. La otra cosa que me ayudó a salir, fue jugar rol. Leyenda de los Cinco Anillos, mi primer personaje creado por mi(habia jugado una vez antes con un personaje armado mas por el master que por mi), quise que ese personaje fuera todo lo que yo quería ser, era mi oportunidad de ser lo que no podia ser acá en este mundo, una shugenja(maga-sacerdotiza)
llamada Doji Kachimichiko(mujer del camino de la Victoria), seguidora de los caminos de la curación, de alineación caotica-buena(buena, pero medio loca), con un destino superior que si bien no conocía, sabía que debía cumplir. Interpretando este personaje en el viejo foro de Ociojoven fue que me di cuenta, que Doji Kachimichiko(mi personaje), no era en realidad lo que yo quería ser, sino que era realmente yo, es decir, que yo podía ser quien yo quisiera.

Pasé de ser rechadaza a ser admirada, "eres una mujer fuerte" decían algunos, me gane el respeto de muchos, y hice también de un nombre que duró un par de años después de cerrado el foro y de haber dejado el mundo de los fotos.

En realidad, soy la misma de antes, la única diferencia, es que ahora me quiero, me valoró tal como soy, con mis kilos de mas, con mi carácter explosivo, con mi mal humor legendario, con mi neurosis tan típica mía de cuando las cosas no salen como quiero.

Finalmente, jugando rol sobreviví a mi depresión, gracias a Mia Spencer, y jugando rol salí de mi depresión y aprendí a vivir de nuevo, gracias a Doji Kachimichiko.

Aprovecho de pedirle disculpas a todos mis viejos compañeros del liceo, que tuvieron que aguantarme en el peor de mis tiempos, cuando la luz del sol no era aun capaz de calentar mi rostro, y las caricias del viento se sentías en realidad como golpes de látigos castigadores, aquel tiempo en que no habia luz, y todo era negro.

Y aprovecho también a recordarles a varios de mis queridos amigos que estan necesitando de alguien, que por un lado, me tienen a mi, y por otro, que no hay mal que dure 100 años, ni enfermo que los aguante

Yo no aguante 100 años.... decidí cambiar ;)

2 comentarios:

  1. Hola Dama Michi, llegué tarde a este escrito pero quería dejarte un comentario. Me encanta que hables de vos, aunque te conozco poco sé que tenés un mundo enorme para compartir.
    También, por sobre todas las cosas, quiero que sepas (vos y todos los que están leyendo) que siempre hay gente que los quiere mucho y van a estar ahí cuando los necesiten. Me pone muy contento que hables de algo que quedó atrás.
    Un beso enorme.

    ResponderEliminar
  2. Gracias Gus por el comentario!!!

    Este es un texto que hace un tiempo puse en facebook, y me pareció interesante compartirlo por acá también :)

    ResponderEliminar